Ante perspectivas de desaceleración económica, muchas empresas recortan el presupuesto en comunicación, olvidando que parte de su trabajo consiste precisamente en actuar en momentos de recesión económica. ¿Quiere saber cómo?
En momentos de crisis económica, las empresas tienden a tomar medidas de urgencia como reducir sus inversiones en comunicación y marketing, convirtiendo esta decisión en un gran error estratégico. Es en estas etapas de crisis cuando las empresas que aportan un valor diferencial tienen la oportunidad de perfilar su marca, asentar su producto y diferenciarse de aquellas más débiles, para conseguir salir reforzadas.
Lograr todos estos objetivos pasa por reservar, en los presupuestos generales de la empresa, una partida para comunicación que contribuya y ayude a decir al público y a su personal cuál es su papel y su utilidad, cuál es el valor de su producto y por qué es necesario contar con él y, en definitiva, adquirirlo.
Todas las empresas, y no sólo las grandes, sino también las familiares y pymes, deberían ser transparentes y facilitar la comunicación en el seno del negocio, sobre todo en un tiempo en que la coyuntura económica amenaza la estabilidad de las empresas.
Vivimos en una época en que la comunicación ha pasado de ser un lujo, del que sólo disfrutaban las grandes compañías multinacionales, a convertirse en una necesidad para las empresas.
En tiempos de crisis, los servicios de las consultoras de comunicación o gabinetes de prensa, pueden llegar a sustituir en gran parte a otras partidas que requieren una inversión mucho más elevada en comparación con las herramientas que se emplean en comunicación. Además, parte de este trabajo consiste en actuar en momentos de recesión económica, a través de la formación de gabinetes de crisis cuyo objetivo es atenuar los efectos negativos que puedan llegar al público y a los consumidores.
De hecho, la crisis está animando a muchas empresas a confiar en la comunicación para poder afrontarla mejor, porque en tiempos de crisis es más importante que nunca.
Y, en contra de lo que pudiera parecer, contar con los servicios de una agencia de comunicación está al alcance de cualquier empresa, sea del tamaño que sea. Además, resulta mucho más económico que otras estrategias de marketing. Por el precio que cuesta un solo anuncio en un diario de tirada nacional, por ejemplo, se puede contratar durante un año a una agencia de comunicación.
En estos momentos, cualquier empresa, por pequeño que sea su volumen de facturación anual, puede permitirse aparecer en los medios de comunicación: diarios, revistas, radios, televisiones, publicaciones especializadas, webs, etc., a través de los servicios que proporciona una agencia de comunicación, pero, sin embargo, muy pocas pueden pagar una campaña publicitaria.
Es decir, con una agencia de comunicación, las empresas ahorran dinero. Pensemos que con una sola nota de prensa que contenga, de forma eficazmente redactada, todo aquello que queremos transmitir al público sobre nuestra empresa, se puede llegar a todos los medios de comunicación que pretendamos y obtener muchos impactos en forma de noticia, reportaje, entrevista, etc.
De esta manera, las agencias de comunicación proponen un método muy eficaz, porque la información es más creíble y llama más la atención del público, y más económico porque no hay que pagar por cada aparición que se consigue en los medios.
Del mismo modo, es importante que los miembros de una agencia que llevan a cabo los servicios de comunicación para empresas, sean periodistas. En ocasiones asumen estas labores otros profesionales no preparados para ello y esto es un error. Sólo un periodista conoce cómo se trabaja en los medios, cómo se elaboran las noticias, qué es o no lo verdaderamente noticiable, cuándo y qué se puede decir a los medios y cuándo y cómo se les puede convocar. Amén de los contactos que un periodista tiene naturalmente por su trabajo y formación en los diferentes medios.
En definitiva, contar con los servicios de un gabinete de prensa debe considerarse como una inversión, no como un gasto, porque se refleja de forma directa en la cuenta de resultados de la empresa y contribuye a generar una imagen positiva de la misma entre sus clientes y público en general.
En momentos de crisis económica, las empresas tienden a tomar medidas de urgencia como reducir sus inversiones en comunicación y marketing, convirtiendo esta decisión en un gran error estratégico. Es en estas etapas de crisis cuando las empresas que aportan un valor diferencial tienen la oportunidad de perfilar su marca, asentar su producto y diferenciarse de aquellas más débiles, para conseguir salir reforzadas.
Lograr todos estos objetivos pasa por reservar, en los presupuestos generales de la empresa, una partida para comunicación que contribuya y ayude a decir al público y a su personal cuál es su papel y su utilidad, cuál es el valor de su producto y por qué es necesario contar con él y, en definitiva, adquirirlo.
Todas las empresas, y no sólo las grandes, sino también las familiares y pymes, deberían ser transparentes y facilitar la comunicación en el seno del negocio, sobre todo en un tiempo en que la coyuntura económica amenaza la estabilidad de las empresas.
Vivimos en una época en que la comunicación ha pasado de ser un lujo, del que sólo disfrutaban las grandes compañías multinacionales, a convertirse en una necesidad para las empresas.
En tiempos de crisis, los servicios de las consultoras de comunicación o gabinetes de prensa, pueden llegar a sustituir en gran parte a otras partidas que requieren una inversión mucho más elevada en comparación con las herramientas que se emplean en comunicación. Además, parte de este trabajo consiste en actuar en momentos de recesión económica, a través de la formación de gabinetes de crisis cuyo objetivo es atenuar los efectos negativos que puedan llegar al público y a los consumidores.
De hecho, la crisis está animando a muchas empresas a confiar en la comunicación para poder afrontarla mejor, porque en tiempos de crisis es más importante que nunca.
Y, en contra de lo que pudiera parecer, contar con los servicios de una agencia de comunicación está al alcance de cualquier empresa, sea del tamaño que sea. Además, resulta mucho más económico que otras estrategias de marketing. Por el precio que cuesta un solo anuncio en un diario de tirada nacional, por ejemplo, se puede contratar durante un año a una agencia de comunicación.
En estos momentos, cualquier empresa, por pequeño que sea su volumen de facturación anual, puede permitirse aparecer en los medios de comunicación: diarios, revistas, radios, televisiones, publicaciones especializadas, webs, etc., a través de los servicios que proporciona una agencia de comunicación, pero, sin embargo, muy pocas pueden pagar una campaña publicitaria.
Es decir, con una agencia de comunicación, las empresas ahorran dinero. Pensemos que con una sola nota de prensa que contenga, de forma eficazmente redactada, todo aquello que queremos transmitir al público sobre nuestra empresa, se puede llegar a todos los medios de comunicación que pretendamos y obtener muchos impactos en forma de noticia, reportaje, entrevista, etc.
De esta manera, las agencias de comunicación proponen un método muy eficaz, porque la información es más creíble y llama más la atención del público, y más económico porque no hay que pagar por cada aparición que se consigue en los medios.
Del mismo modo, es importante que los miembros de una agencia que llevan a cabo los servicios de comunicación para empresas, sean periodistas. En ocasiones asumen estas labores otros profesionales no preparados para ello y esto es un error. Sólo un periodista conoce cómo se trabaja en los medios, cómo se elaboran las noticias, qué es o no lo verdaderamente noticiable, cuándo y qué se puede decir a los medios y cuándo y cómo se les puede convocar. Amén de los contactos que un periodista tiene naturalmente por su trabajo y formación en los diferentes medios.
En definitiva, contar con los servicios de un gabinete de prensa debe considerarse como una inversión, no como un gasto, porque se refleja de forma directa en la cuenta de resultados de la empresa y contribuye a generar una imagen positiva de la misma entre sus clientes y público en general.
No hay comentarios:
Publicar un comentario